12 de julio. Amanece en Río. Un Río cada vez más imaginario, fruto de mis idas y venidas en bicicleta por la parte sur de la ciudad. Un Río que se empezaba a mostrar como un organismo vivo, un estado de ánimo, una forma de contar las cosas.
12 de julio. Amanece en Río. Un Río cada vez más imaginario, fruto de mis idas y venidas en bicicleta por la parte sur de la ciudad. Un Río que se empezaba a mostrar como un organismo vivo, un estado de ánimo, una forma de contar las cosas.